Para nadie es una novedad que la selección chilena va en una curva ascendente en relación a su nivel futbolístico. El punto de partida de esta Roja 2.0 estuvo en el cambio de mentalidad del jugador chileno, generado por Marcelo Bielsa. No voy a ahondar en las características de esta transformación porque para todos son muy conocidas, llamémosle a este cambio, simplemente, profesionalización de los métodos.
Desde el momento que se empezó a profesionalizar el funcionamiento de nuestra selección, los resultados positivos aparecieron casi de golpe, con la obtención del segundo lugar (a un punto de Brasil) en las eliminatorias rumbo al mundial de Sudáfrica 2010. Se dice que lo difícil no es alcanzar los primeros puestos, sino que mantenerse, y esto ultimo es exactamente lo que ha hecho la selección de Chile durante todo este tiempo, inclusive se puede hablar de una profundización del sistema a manos de Jorge Sampaoli. Este actual “poder” de Chile es el que tenemos que cuidar y pulir.
La Roja tiene una identidad de juego, jugadores interiorizados con esa forma de jugar, una fama global y un hambre voraz por ganar un título, ese es el patrimonio que maneja Sampaoli y que, a raíz de sus dichos, quiere mantener a toda costa: “El respeto que se ganó este grupo en el Mundial no puede perderse”. A lo que voy es que ya no dependemos de individualidades o de la suerte de último minuto, porque en la selección se han ido sumando argumentos futbolísticos y eliminando el margen de error. Gracias a todo esto es que existe la OPORTUNIDAD para levantar esa copa tan deseada por todos y se llama Copa América 2015, de aquella gran oportunidad hablaré más adelante.
En mi opinión, son dos las cosas más importantes que Chile tiene que seguir fortaleciendo de cara al evento de Junio y Julio: su propuesta futbolística (obviamente), centrándose en como resolver la carencia de gol. Y como segundo aspecto a fortificar, el estatus. Para ejemplificar la posición que se ha ganado La Roja en el mundo, miremos las declaraciones de Claudio Pizarro en la antesala del amistoso entre Chile y Perú “Mis compañeros en el Bayern Munich me decían: te van a dar un baile. Es que saben del nivel de Chile y lo que ha hecho en los últimos años”. Las estadísticas de la FIFA dicen que Chile está en el puesto 12 (cuatro sudamericanos antes) del ranking de selecciones, si a esto le sumamos el imponente estilo que ofrece Chile en los partidos, lo que tenemos es una personalidad intimidante para el resto de los seleccionados. Muchas veces el que gana la pelea no es el más fuerte o grande, sino el con mayor personalidad o el mas achorado. La cuestión para la selección es que esa “perso” debe derivar en gol.
Para que esta personalidad chilena sea aun más contundente es preciso pasar a la siguiente etapa. El subcontinente de América del Sur tiene solo a diez países desarrollando un futbol de primera y de esos diez, Brasil y Argentina se encuentran un escalón más arriba para con los demás (aunque esas brechas de han ido acortando). La pregunta que surge es ¿quien es el tercero en el podio? Aquí quiero ser enfático ¡Chile tendría que ser ese tercer equipo! Dejando fuera la historia, creo que al fútbol de Chile le corresponde ese sitial y que está el contexto para ser la nueva potencia del fútbol sudamericano. Lo digo sin perder de vista el poderío actual de Colombia, Uruguay y Ecuador, ¡si se hacen las cosas bien, La Roja puede erguirse como el tercer mejor equipo de América.
Por último, continúo lo que esbocé al principio: misión apoderarse de la Copa América 2015. Como dije, nuestros rivales a vencer son Brasil y Argentina, en un escenario neutro pienso que es muy difícil que por ahora Chile pueda derrotar a estas dos selecciones, el punto es que la Copa América se jugara de local, plus o ventaja primordial a la hora de sacar cálculos y hacer estrategias. Nuestra cancha, nuestro clima y nuestra hinchada, que al igual que la barra de Boca Juniors, trabajara como jugador numero 12 para la selección chilena. Otra razón para ilusionarse es que tanto la verdeamarela como la albiceleste acaban de renovar al DT -Dunga y Martino- lo que significa un reseteado de metodología, un volver a empezar para ambos equipos. Argumentos existen, falta concretar o dicho de otra forma, traigan copas que champagne sobra.