El pasado domingo Sport Recife se impuso 1-0 ante el Náutico por la segunda ronda del Torneo Pernambucano. Más allás del resultado y la victoria del local, el hecho que llamó la atención de los hinchas presentes en el estadio y de todo el mundo del fútbol en Brasil fue que 33 madres trabajaron durante el encuentro como guardias de seguridad. La iniciativa fue todo un éxito.
La medida se enmarca en la campaña “Mães Seguranças” (Madres Guardias de Seguridad). Para ello, el cuadro de Pernambuco solicitó a sus fanáticos con mucha discresión datos sobre sus progenitoras, sin indicarles exactamente el motivo. Ya en el partido, la noticia fue comunicada a todos los asistentes por pantalla gigante y megafonía, ante el desconcierto y la sorpresa de los espectadores.
Debido a que no hubo incidentes durante el cotejo, la dirigencia de Sport Recife está evaluando repetir la experiencia en otras oportunidades en que el equipo juegue como local.