A comienzos de temporada Manuel Pellegrini llegó con bombos y platillos a la banca del Manchester City un equipo que contaba con figuras de la talla de Sergio Agüero, David Silva, Yaya Toure y Samir Nasri. A estos grandes jugadores se les sumaron las millonarias contrataciones de Álvaro Negredo, Jesús Navas y Fernandinho, entre otros. Un equipo plagado de estrellas que aspiraba a ganarlo todo.
Y el comienzo del equipo ciudadano fue realmente espectacular ubicándose en el primer lugar de la tabla batiendo record de partidos ganados y goles convertidos. El cuadro del entrenador chileno era la sensación de Inglaterra y nuestro compatriota recibía elogios de todas las partes del mundo. Además, el “Ingeniero” lograba avanzar a la segunda ronda de la Champions League hecho histórico para el City.
Parecía que era el momento justo para que Manuel Pellegrini pudiera coronar con títulos su gran carrera en Europa, algo muy importante para la carrera del técnico nacional especialmente después de lo ocurrido durante su paso por el Real Madrid. Una oportunidad perfecta para callar a los críticos que señalaban que Pellegrini era un buen entrenador pero no tenía la capacidad para dirigir equipos grandes y de obtener campeonatos.
Sin embargo, con el correr de los meses comenzaron las dudas en torno a la capacidad de Manuel Pellegrini. Los “Citizens” mostraron su peor cara en importantes partidos como los enfrentamientos en la Premier ante el Chelsea de José Mourinho y ante el Barcelona en la Champions League perdiendo contra ambos cuadros en calidad de local y visita. También, hay que sumar la eliminación en la FA Cup ante el Wigan Athletic, equipo de la segunda división inglesa, en uno de los peores partidos del Manchester City en la era Pellegrini. La obtención de la Capital One sólo fue en bálsamo para el conjunto inglés.
A pesar de eso en el torneo local los ciudadanos contaban con las opciones intactas considerando que tenían tres partidos menos que el resto de los equipos que peleaban el título. Pero el cuadro de Manchester sufrió una increíble baja en su rendimiento que lo alejaron de la punta de la tabla y lo tienen en la actualidad a 9 puntos del líder Liverpool. Un equipo que parece llegar sin bencina al término de la temporada.
Si bien al Manchester City le quedan dos partidos menos que de ganarlos lo podrían dejar a tres puntos del cuadro de Luis Suarez, lo que preocupa es el rendimiento futbolístico que muestra el equipo del DT chileno. Además, hay que consideran que ya no dependen de sí mismo para levantar la copa en Inglaterra y a falta de tres fechas el objetivo de ser campeones se ve muy lejos y por muchos millones de euros invertidos en refuerzos los títulos no están asegurados.
Manuel Quinteros Guerrero.
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